Nuestro objetivo:

La cátedra nacional de economía política Arturo Jauretche busca recuperar la experiencia de las Cátedras Nacionales de los años setenta para pensar en clave nacional los grandes problemas económicos del país.

Visitas en total

Buscar dentro de la página:

Translate

martes, 11 de febrero de 2014

En InfoBae: Las presiones devaluatorias e inflacionarias buscan forzar un cambio en el régimen de acumulación.

Por Nicolas Zeolla.

Desde hace unas semanas la economía argentina está viviendo una intensificación de la disputa distributiva. Esta disputa se ve reflejada en dos variables nominales claves: el precio de dólar y la inflación. La vinculación entre ambas resulta esencial para poder comprender el estado del funcionamiento de la economía en cualquier sociedad.
Estas variables han sido muy estudiadas por la escuela de pensamiento económico que se conoce como el Estructuralismo Latinoamericano. Estas ideas fueron el resultado del pensamiento de los economistas de América Latina como Raúl Prebisch, Osvaldo Sunkel, Celso Furtado, Oscar Braun y Marceo Diamand, entre otros. Su surgimiento se relaciona a la experiencia de estos economistas en distintos ámbitos académicos y de la gestión pública, vinculados con la toma de decisiones en los procesos de industrialización que emprendieron nuestros países a de mediados del siglo XX. El carácter de interés por entender problemas prácticos fue una de las principales características que se imprimió en este tipo de pensamiento, vinculando nociones históricas, sociales y políticas en una misma formulación conceptual.
Los países que se han comprometido en el desarrollo de un proceso de industrialización suelen enfrentarse un problema económico similar, conocido como restricción externa. Esta dificultad consiste en la capacidad que los países poseen para financiar las importaciones de bienes, insumos y tecnología necesarios para el desarrollo de su industria nacional. Este desarrollo implica la adquisición de un conjunto de capacidades tecnológicas y es la única salida para achicar la brecha de ingresos con los países capitalistas más avanzados. En el medio de este camino, es necesario una política de tipos de cambio diferenciales que implica la administración del precio del dólar junto con un conjunto de medidas de aranceles y subsidios de acuerdo con la competitividad de cada sector de la economía que se pretende desarrollar. Por el lado distributivo, la consecuencia lógica de un proceso de crecimiento y cambio estructural es la existencia de tensiones por la participación en las distintas porción del excedente, que resulta en cierto grado de inflación, fenómeno presente en todos los países hoy industrializados, y que, administrada con diversas políticas de ingresos, no resulta problemática.
Entre tanto, estos procesos no suceden en el vacío, son el resultado de fracciones sociales que legitiman los intereses y su proyecto político hacia el conjunto de la sociedad. Este proyecto político es conducido por una fracción hegemónica cuyos intereses resultan ser los del conjunto de la sociedad. Este proceso de legitimación incluye un ordenamiento institucional (de hecho o legislado) conocido como régimen de acumulación, donde se distribuyen prioridades y beneficios en un sentido amplio, el cual es relativamente estable en el tiempo. Este mecanismo trae consigo el perfil de inserción internacional (si al resto del mundo le vamos a vender granos o productos manufacturados) cuyo origen es la distribución del excedente del proceso de acumulación y su resultado un esquema estable de procesamiento de conflictos políticos (de distinta magnitud) que se generan entre tanto.

lunes, 10 de febrero de 2014

En Página 12. Temas de debate: Los efectos de una historica estructura productiva desequilibrada.

El huevo de la serpiente
Producción: Tomás Lukin
 
Las señales del mercado 
Por Norberto E. Crovetto.

La formación de la economía argentina desde nuestra independencia se hizo al calor del mercado global armado por Inglaterra. Esa primera globalización nos ubica, por la extraordinaria productividad del campo, como proveedores de carne y granos. La provisión de materias primas y alimentos baratos es crucial para el desarrollo industrial de los países centrales. Producimos más barato las carnes y los granos que en los países centrales, luego resulta más barato intercambiarlas por manufacturas importadas que producirlas internamente. Se impone políticamente una organización económica cuyas señales ordenan la economía en base a los principios de las ventajas comparativas, siendo nuestro rol el ser “granero del mundo”. Las señales de mercado son instituidas orientando la actividad económica en cumplimiento de la división internacional del trabajo.
Desafortunadamente, la economía no suele mantener en el tiempo su equilibrio y las señales del mercado pierden fuerza en su carácter primordial de orientación y coordinación; producto de las crisis y guerras mundiales el país se industrializa. Una vez resueltos los desequilibrios y reencauzada la actividad económica mundial y bajo un nuevo dominio político (el ascenso de EE.UU. en lugar de la Gran Bretaña), se reordenan los mercados y sus señales. Nuevamente se impone el rol de ser el “granero del mundo”, pero ahora en conflicto con el proceso de industrialización, generándose una economía que Diamand ha denominado Estructura Productiva Desequilibrada (EPD), por la cual coexisten productividades relativas entre los sectores industrial y primario diferentes de las internacionales. La mejor productividad del campo que la internacional resulta en un producto industrial relativamente más caro que el de nivel internacional. O de otra manera, gracias a un costo menor en los países centrales del producto industrial dado por la importación de alimentos, aquél resulta relativamente más barato que el producido en nuestras tierras.

Mito económico (Página/12-Cash): Un mundo armado para el capital trasnacional.

Globalización
Por Andrés Asiain y Lorena Putero

En un mundo donde los desarrollos tecnológicos han reducido el peso de las distancias geográficas, crecen las utopías de configuración de una aldea global. Anticipando un posible movimiento en esa dirección, los centros de poder mundial fueron plasmando su propia idea de sociedad global. Al calor de la imposición de políticas neoliberales que desregularon el movimiento del dinero y las mercancías a través del mundo (pero no de los seres humanos), empoderaron al capital trasnacional para que comande una nueva división internacional del trabajo cuyos principales resultados son la concentración de los ingresos en una elite planetaria, la especulación como forma de crear demanda y las frecuentes crisis económicas.
Las políticas neoliberales de desregulación de los mercados empoderan a la empresa trasnacional porque le permiten condicionar sus inversiones en cada región de acuerdo con las concesiones que realizan sus gobiernos en materia impositiva, laboral y ambiental. El país que más cede tiene más chances de obtener la localización en él de la inversión productiva y transformarse en una plataforma de exportación. Los que buscan mantener elevados estándares sociales serán víctimas del desempleo cuando sus fábricas cierren por el arribo de productos extranjeros producidos en peores condiciones sociales. Es así como las multinacionales han tendido a deslocalizar sus sectores intensivos en mano de obra en naciones consideradas reservorios de mano de obra barata, como China e India, presionando luego por la vía de la competencia mercantil sobre las condiciones de producción de los demás países. Los países más ricos han retenido eslabones de la producción más sofisticados por sus ventajas tecnológicas y otros donde los costos de transporte son elevados (y pesa más la cercanía al mercado). Africa y América latina surgen como los proveedores de materias primas de esa nueva división internacional del trabajo, excepto México y parte del Caribe, que pueden aspirar a producir maquila para el mercado norteamericano.
 

martes, 4 de febrero de 2014

En LT14 Radio General Urquiza AM-1260: Destacan el alcance federal de los acuerdos de precios.

"Permitirán un cambio cultural importante" Destacan el alcance federal de los acuerdos de precios El economista Ernesto Mattos, analizó el panorama actual que representa para el consumidor, el que se lleven adelante acuerdos de precios que se implementan desde el Estado. Indicó a LT14 que "es responsabilidad de todos" velar por el cumplimientos de los convenios."Es responsabilidad de todos los argentinos cuidar los precios, los consumidores deberán tomar más posicionamiento en cuanto a cotejarlos y ver si se cumplen" los acuerdos, explicó el economista Ernesto Mattos en diálogo con Sexto Sentido. Asimismo indicó que los Precios cuidados para el sector de productos que se adquieren en supermercados y despensas, tanto como los convenios para el sector de la construcción, "permitirán un cambio cultural importante", porque lleva "a romper el individualismo que ya hizo mucho mal en la década de los '90. Se busca dejar de lado el famoso no te metás", enfatizó el analista. Por otro lado, señaló que la implementación de los acuerdos en las provincias, "implica dejar de mirar hacia sí mismo para ver qué pasa en otros lugares, porque cada territorio tiene realidades distintas", dijo y añadió que desde Buenos Aires "pensamos que todo es según como ocurre acá, y de a poco hay que ir rompiendo eso", entendió Mattos.

En Radio Nacional Tucumán: El problema no es económico, sino político.

El economista Ernesto Mattos, en diálogo con Radio Nacional, analizó como repercutieron las medidas económicas anunciadas, hace unas semanas atrás por el Gobierno Nacional, y el impacto que generó en el mercado, dejando en claro que “problema no es económico, sino politico”. A la hora de fundamentar su pensamiento, Ernesto Mattos, manifestó que “El tema del dólar para un sector económico es un detalle en esta cuestión. Por eso un grupo de empresario llamó al arco político de la oposición para disputar el estado. Para cualquier grupo económico o fuerza política; cuando se quiere ejercer la hegemonía, se requiere de ejercer el estado. Ante esto plantearon una disputa central como el dólar”. El economista también dejó en claro que están en juego algunos intereses, porque “Massa aparece como el personaje que quiere evitar la consolidación del poder del kirchnerismo y hoy los encuentran reunidos a la cámara norteamericana de comercio, a la sociedad rural y a la Unión Industrial Argentina. Entonces uno va atando cabos. Por eso hay que ir informándose como se mueven las variables, porque sino nos vamos a ver con un cambio de arco político y una vieja política de relación carnal con los Estados Unidos”.
 

En el Suple-Eco (Tiempo Argentino): Acompañar con medidas que moderen el impacto distributivo.

Por Nicólas H. Zeolla.

La gestión del nuevo presidente del Banco Central tiene poco más de dos meses pero, debido a la actualidad económica, las decisiones que surjan de esa entidad serán de gran relevancia en las próximas semanas.
La llegada del Sr. Fábrega al frente de la entidad fue saludada por los colegas de otras entidades bancarias y contó con el respaldo unánime de los senadores a su pliego de designación (sólo hubo una abstención), pues se destaca su sobrada experiencia en el manejo de los temas del sector por una larga trayectoria dentro del Banco Nación, entidad que presidió.
Yendo a la economía argentina actual, existen temas de ineludible atención. Tras una década de crecimiento con distribución explicado por el ensanchamiento del mercado interno, los problemas estructurales de la industrialización se hacen visibles en la restricción externa. La escasez de divisas con las que financiar las importaciones (muchas de ellas para ensambladoras transnacionales poco intensivas en mano de obra) implican presiones en el mercado cambiario que se reflejan en dos variables: el stock de reservas y la cotización del dólar. Durante el modelo de industrialización de los años '50, '60 y '70, este dilema era resuelto por el "ajuste clásico" que consistía en una devaluación que contrajese el poder adquisitivo del salario y generase los dólares excedentes con los que financiar la nueva expansión.
Sin embargo, la macroeconomía de hoy día cuenta con superávit comercial, cuentas fiscales ordenadas y un nivel de reservas considerable para escaparle a esta situación. Lo que sucedió con la cotización del dólar a finales de la semana pasada fue producto de una maniobra especulativa del bloque hegemónico conformado por el complejo financiero-exportador que lo que busca es discutirle al gobierno el modelo económico presionando una devaluación que erosione el poder adquisitivo del salario. 


En el Suple-Eco (Tiempo Argentino): Hay un amplio rango de maniobra.

Por Estanislao Malic.

Desde la asunción del nuevo equipo económico las medidas del Banco Central siguieron un patrón, donde el principal objetivo parece ser contener el permanente drenaje de divisas.
as mismas consistieron esencialmente en mantener la senda alcista de las tasas iniciada en abril de 2013, tocando actualmente la Badlar (tasa promedio de bancos privados para depósitos mayores a 1 millón de pesos a 30 días) los 22 puntos, y realizar inicialmente una aceleración de la pauta devaluatoria.
Sea por presiones sectoriales o por expectativas, la liquidación de exportaciones se redujo drásticamente, observándose acumulación de stocks y merma de oferta en el mercado de divisas.
El ofrecimiento de un bono del Banco Central indexado por tipo de cambio oficial no hizo mella, y el equipo económico no encontrando salida a la difícil situación del sector externo decidió realizar la ya conocida y brusca depreciación de la semana anterior, buscando paliar las expectativas y volver a estimular el ingreso de dólares al mercado cambiario.
 

Mito económico (Página/12): Un trabajo de la derecha estadounidense indice de libertad económica.

índice de libertad económica   
Por Andrés Asiain y Lorena Putero 

Recientemente se conoció el “índice de libertad económica” elaborado por The Heritage Foundation y The Wall Street Journal. Según sus autores, el mismo “ha seguido el progreso de la libertad económica alrededor del mundo”, encontrando que se ha dejado atrás la creciente intervención estatal en el marco de la última crisis internacional, permitiendo alcanzar la marca de libertad económica “más elevada de los últimos 20 años”. A contramano del mundo, la Argentina continuó retrocediendo en el ranking libertario, ubicándose en la posición 166 dentro de un universo de 186 países analizados. Las causas del retroceso son “los duros controles de capitales, fijación de precios, restricciones a las importaciones y una serie de nacionalizaciones”. También consideran un retroceso de la libertad económica que “bajo la presidencia de Cristina Fernández de Kirchner, Argentina ha fortalecido lazos con gobiernos de la región que son hostiles a la libertad y ha amenazado el derecho de las islas Malvinas a la autodeterminación”.
Antes de sumergirnos en el análisis del índice, empecemos por conocer a sus elaboradores. La Fundación Patrimonio es una usina estadounidense de ideas conservadoras por la que pasaron Margaret Thatcher, Ronald Reagan y George W. Bush. Al ingresar a su portal puede observarse una campaña de desprestigio al presidente norteamericano Obama y su propuesta de universalización del acceso a la salud. También deja al descubierto su ideología un cartel que indica “¿Debemos aumentar el salario mínimo? No si queremos crear trabajo”. El Diario de la Calle del Muro es un periódico vinculado con el centro financiero norteamericano y sus ideas de desregulación de los mercados.
El índice lo elaboran tres norteamericanos de pelaje conservador en base a una serie de indicadores y opiniones, basadas en informes del gobierno y empresas estadounidenses, de organismos internacionales y de la prensa local e internacional. El trabajo con los medios de los distintos países es de ida y vuelta, ya que ellos le pasan su línea editorial y después utilizan el resultado del índice para mostrar que su línea es compartida por “expertos del primer mundo”. Así, La Nación difundió el resultado del índice bajo títulos como “Mala nota para la Argentina en un ranking de libertad económica” y “La Argentina, reprobada en libertad económica”, mostrando el trabajo conjunto entre los sectores conservadores de nuestro país y Estados Unidos, en favor de un proyecto liberal global. Por su parte, Clarín prefirió titular “El Gobierno salió a criticar un ranking en el que a la Argentina le fue mal”, añadiendo que “según el informe, sólo Cuba y Venezuela tienen menos libertad económica” para sumar un nuevo grano de arena a su campaña por alejar a sectores profesionales y empresariales del apoyo al oficialismo bajo el temor a una futura expropiación de sus bienes cuando la “chavicubanización” del kirchnerismo sea total.