Por Ernesto Mattos.
Tras las elecciones a representantes para el Congreso de la Nación, no faltaron los distintos discursos de agradecimiento y alegría de algunos (hoy) representantes del pueblo. Algunos con más énfasis en el futuro y otros en el pasado, los distintos discursos mostraron y dejaron claro su intención a la hora de asumir su banca.
El primero discurso tuvo que ver con el senador por UNEN, Fernando “Pino” Solanas. ”Va mi agradecimiento a ese ejército de militantes y de fiscales que protagonizaron esta jornada memorable para nosotros, va mi agradecimiento para las conducciones y los referentes y los espacios políticos que componen UNEN y que comprendimos y supimos oír el reclamo y mensaje que la ciudadanía nos dio en tres multitudinarias marchas en septiembre, noviembre y abril”, recordó Solanas.
Estas marchas a las cuales aduce Pino tuvieron un reclamo explicito y un programa económico que el economista Ricardo Aronskind descifró de entre esos ruidos de cacerolas de teflón que sonaban en las calles, el 8N (2012): ”1. Libertad cambiaria; 2. Libertad de precios; 3. Libertad comercial; 4. Eliminación de las distorsiones impositivas; 5. Reducción de la carga fiscal; 6. Reducción del gasto público; 7. Reducción de la inflación; 8. Arreglo con los acreedores externos; 9. Acuerdos de libre comercio; 10. Creación de clima de negocios”.
Entre las banderas que Pino “llevaría a la victoria”, una sería -aliándose a Federico Sturzenegger (PRO)- la libertad de adquirir dólares. Promesa que el candidato del PRO tuvo en su campaña. Esto significaría la vuelta a la fuga de capitales; utilizar e incentivar, vía tipo de cambio, la posibilidad de propiciar una devaluación para conseguir dólares con el correlato de hacer deprimir el ingreso de los trabajadores. Este programa económico que emergió en las marchas de septiembre, noviembre y abril son para el senador por UNEN un mensaje que tratará de impulsar desde el Congreso ¿Hará lobby para aquellos especuladores que fugaron dólares en estos últimos 10 años? Esos que esperan pacientemente una devaluación que les permita volver a traer las divisas para comprarse inmuebles, empresas y en un contexto de salarios devaluados. ¿Luchará, este candidato junto a la republicana Lilita, para que los importadores puedan traer toda las mercancías que el ogro Moreno impide ingresen desde el exterior?
El primero discurso tuvo que ver con el senador por UNEN, Fernando “Pino” Solanas. ”Va mi agradecimiento a ese ejército de militantes y de fiscales que protagonizaron esta jornada memorable para nosotros, va mi agradecimiento para las conducciones y los referentes y los espacios políticos que componen UNEN y que comprendimos y supimos oír el reclamo y mensaje que la ciudadanía nos dio en tres multitudinarias marchas en septiembre, noviembre y abril”, recordó Solanas.
Estas marchas a las cuales aduce Pino tuvieron un reclamo explicito y un programa económico que el economista Ricardo Aronskind descifró de entre esos ruidos de cacerolas de teflón que sonaban en las calles, el 8N (2012): ”1. Libertad cambiaria; 2. Libertad de precios; 3. Libertad comercial; 4. Eliminación de las distorsiones impositivas; 5. Reducción de la carga fiscal; 6. Reducción del gasto público; 7. Reducción de la inflación; 8. Arreglo con los acreedores externos; 9. Acuerdos de libre comercio; 10. Creación de clima de negocios”.
Entre las banderas que Pino “llevaría a la victoria”, una sería -aliándose a Federico Sturzenegger (PRO)- la libertad de adquirir dólares. Promesa que el candidato del PRO tuvo en su campaña. Esto significaría la vuelta a la fuga de capitales; utilizar e incentivar, vía tipo de cambio, la posibilidad de propiciar una devaluación para conseguir dólares con el correlato de hacer deprimir el ingreso de los trabajadores. Este programa económico que emergió en las marchas de septiembre, noviembre y abril son para el senador por UNEN un mensaje que tratará de impulsar desde el Congreso ¿Hará lobby para aquellos especuladores que fugaron dólares en estos últimos 10 años? Esos que esperan pacientemente una devaluación que les permita volver a traer las divisas para comprarse inmuebles, empresas y en un contexto de salarios devaluados. ¿Luchará, este candidato junto a la republicana Lilita, para que los importadores puedan traer toda las mercancías que el ogro Moreno impide ingresen desde el exterior?
Nota de opinión: Paz, orden y progreso con programa económico incluido.
No hay comentarios:
Publicar un comentario